EXTREMADURA PLASENCIA GALCO: Juliá Garrote (6), Rubén Ibeas (8), Dominick Martin (15), Jason Blair (13) y Nacho Fort (2) -cinco inicial- Mark Zoller (20), Brock Gillespie (7) y Jorge Lledó (13).

AKASVAYU VIC: Eduart Jiménez (7), Albert Sabat (9), Chus Aranda (4), Eulis Báez (12) y Edu Río (12) - cinco inicial - Dragusín (0), Sergio Soria (5), Martí Nuarat (0) y Albert Teruel (14).

ARBITRO: Fraile Carrasco y Sánchez Martín. Muy protestados. Sin eliminados.

MARCADOR POR CUARTOS: 22-15, 45-33 (descanso), 57-54 y 84-67 (final)

INCIDENCIAS: Undécima jornada.

Intenso y vibrante partido el disputado anoche en una Bombonera que disfrutó viendo cómo el Extremadura Plasencia Galco en un último cuarto excepcional humilló a uno de los gallitos.

Los placentinos siempre manejaron el timón del encuentro y hasta el descanso tuvieron muy claro como atenazar el peligro catalán, ya que ni Elius Báez ni Albert Sabat fueron capaces de mojar. Mérito sin duda fue del planteamiento propuesto de Juan Pablo Márquez, que supo manejar a sus peones, que anoche fueron reyes.

Las ventajas locales siempre rondaron la decena de puntos y los dos conjuntos demostraron en la cancha el porqué de su clasificación, fue baloncesto en estado puro. Se pudo ver a Brock Gillespie debutar en casa y el americano quiso responder a su nueva afición con penetraciones que recordaron tiempos pasados. Promete, pero aún es pronto para sacar conclusiones. Al descanso se llegó con una ventaja de doce para los de casa.

Un parcial de 0-7 para el Vic ponía la emoción en el electrónico en el tercer cuarto. En estas, los árbitros, hasta entonces invisibles, quisieron hacerse notar y dos técnicas consecutivas, a Zoller y a Márquez, propiciaron que los catalanes se acercara en demasía al terminar el tercer cuarto (57-54).

SENTENCIA En el tramo decisivo hasta llegaron a ponerse los visitantes por primera y única vez por delante (57-58), pero un triple de Ibeas rompió el mal fario. Con empate a 60 a falta de nueve minutos para el final todo podía pasar, y lo que ocurrió fue una exhibición de Plasencia que endosó un parcial de 24-7 que rompió cualquier atisbo de duda. Con un Zoller excepcional que demostró que su lesión está olvidada. Anoche Plasencia dio un golpe en la mesa de la liga.