Habría que esperar hasta casi las doce de la noche, pero el Cáceres 2016 puede culminar hoy mismo el principal objetivo de la temporada: clasificarse matemáticamente para los playoffs de la LEB Oro que dan derecho a jugar por el ascenso. No será sencillo, porque primero hay que ganarle a domicilio a un equipo que ha hecho una aseada segunda vuelta, el Palencia (21.00 horas, Pabellón Marta Domínguez) y después esperar a que el Tarragona dé la sorpresa en la pista de La Palma (22.00).
Gustavo Aranzana no quiere dejar para otra semana lo que puede hacer esta. Sabe que, pase lo que pase en la isla canaria esta noche, si su equipo gana estará virtualmente en la siguiente fase. Así es que el técnico proclamó ayer a los cuatro vientos que no quiere ni un ápice de relajación ni que se deje el trabajo para el choque ante el Cornellá de la siguiente semana. "Es un partido complicado. Palencia está obteniendo buenos resultado en su cancha, aprovechando las ventajas que genera Oliver Arteaga en el poste medio. Es un equipo que tiene muchísimo ritmo", analizó
En su visión no faltó un repaso a lo que ha sido noticia en el equipo palentino esta semana: la ausencia de Nikola Mirotic, el talentoso pívot cedido por el Real Madrid y que se ha fugado para disputar el Nike Hoop, un partido que enfrenta a los mejores jóvenes europeos contra una selección norteamericana. "Puede afectarles porque es un jugador importante, e imagino que harán más defensas zonales, pero hay jugadores que seguramente estén esperando a ocasiones como ésta para dar un paso adelante, como a lo mejor ha pasado en nuestro caso con la lesión de Dedas y el papel que ha tomado Xavi Forcada", indicó.
CHERRY, DUDA En el Cáceres también hay problemas con hombres clave. Es el caso de Carlos Cherry, que no ha entrenado los dos últimos días por serios dolores de espalda. Su participación es muy dudosa, y en todo caso no lo hará al cien por cien. Una buena oportunidad para que se reivindiquen Perico Sala y Alex González.
Aparte de a La Palma, el Cáceres 2016 también mirará de reojo lo que hagan Burgos --que recibe a La Laguna-- y Menorca, que visita a Vigo. El quinto puesto está difícil, pero no imposible. Aranzana consideró que el reciente cambio de fechas de los playoffs favorece a los equipos con el factor campo a favor. En todo caso, se dio un baño de optimismo: "Podemos ganarle a cualquiera. El problema es quererlo, con humildad", remarcó.
La semana ha sido atípica por tener que trasladarse los entrenamientos al Pabellón V Centenario. "Es lo que hay", se resignó el entrenador, que estimó que el mayor problema no ha sido el parquet ni las canastas, sino "la concentración" por el hecho de que al mismo tiempo las dos pistas auxiliares también estuviesen ocupadas.
Para evitar relajaciones, en el recuerdo está el encuentro de la primera vuelta, ganado por el Palencia por 74-78, su primera victoria como visitante en toda la temporada (22 de diciembre). "Me sentó muy mal perder aquel partido. Nos pusieron en nuestro sitio. Nos dimos cuenta de que o cambiábamos o lo íbamos a pasar muy mal. Afortunadamente, cambiamos", sentenció Aranzana.
