MILAN 1: Abbiati; Simic, Laursen, Costacurta (Abate, m.69), Kaladze; Brocchi, Redondo, Seedorf (Rui Costa, m.46), Serginho; Kaká (Tomasson, m.46), Borriello.

CELTA DE VIGO 2: Cavallero; Angel, Cáceres, Berizzo, Sylvinho; Jesuli, Luccin, José Ignacio (Giovanella, m.80), Juanfran; Gustavo López (Contreras, m.88), Milosevic (Catanha, m.85).

GOLES: 1-0. Min.40: Kaká; 1-1. Min.42: Jesuli; 1-2. Min.71: José Ignacio.

ARBITRO: Kyros Vassaras (GRE). Mostró cartulina amarilla a los jugadores visitantes José Ignacio (m.35), Juanfran (M.46+) y Berizzo (m.81).

Logró el Celta de Vigo el milagro y con su triunfo en terreno del campeón Milan (1-2), y beneficiado por el resultado del otro partido del grupo, accede a los octavos de final de la Liga de Campeones de Europa y escribe una de sus más brillantes páginas.

Lo logró merced a su ambición en la segunda mitad, dejando atrás un primer periodo donde, en verdad, estuvo muy cerca de decir adiós a todas sus aspiraciones europeas. Y no sólo de la máxima competición.

Pero supo reaccionar, justo tras encajar el gol milanista, que pareció ser una espoleta que le puso en acción al Celta, y con un gol de José Ignacio se llevó el triunfo y la clasificación.

La fortuna, además, había dado una mano al Celta en el minuto 19, cuando un saque de falta directo de Serginho estrelló el balón en el travesaño. El cántaro iba tanto a la fuente que terminó por romperse. La joven estrella brasileña Kaká, muy desmarcado, recibió una asistencia de Fernando Redondo, transformando el 1-0 (m.40).

Para su fortuna, la reacción del Celta fue inmediata: dos minutos después, Jesuli, en bella acción individual, alojó el balón en la portería milanista, estableciendo el empate y espabilando a sus compañeros.

La segunda mitad debía ver un Celta distinto. Sus ocasiones se sucedieron. El tanto definitivo tuvo como protagonista a José Ignacio, que desmarcado dentro del área recibió de Luccin y, pese a fallar en el primer intento, tuvo tiempo para tocar lo justo para batir a Abbiati (m.71).