Cristiano Ronaldo regresa en el mejor momento del Real Madrid, para aumentar el poder del líder liguero en Liga de Campeones, competición que centra las ilusiones de la directiva esta temporada, con la final en el Santiago Bernabéu, donde de momento puede dar un paso de gigante hacía octavos si derrota al humilde Zúrich.

El Real Madrid ha sobrevivido a dos meses sin Cristiano Ronaldo. Sin el fichaje estrella del regreso de Florentino Pérez. Con la ausencia del astro portugués tiró por tierra, como es habitual cada campaña, la Copa del Rey, pero ha alcanzado el liderato en Liga y mantenido el de Liga de Campeones, compartido con un Milan al que no consiguió vencer en el doble enfrentamiento.

Esos dos resultados --derrota en el Bernabéu y empate en San Siro-- dejan al Real Madrid con la obligación de ganar a la "cenicienta" del grupo, el Zúrich, que puede despedirse de su sueño si pierde en el coliseo de la Castellana. Recupera Manuel Pellegrini 55 días después la pegada de Cristiano. En principio no será titular y jugará alrededor de media hora. Junto al portugués vuelven, ellos sí directos al once, Sergio Ramos, Raúl Albiol y Lass.

Todo indica a que también será el regreso de Raúl González. La imagen del capitán en el banquillo --ha sido suplente en cuatro de los últimos cinco partidos--, ha dejado de ser noticia. Y ante el Zúrich se perfila titular en el lugar de Karim Benzema, en peor racha goleadora de un Higuaín que se ha ganado el puesto con tantos importantes.

La importancia del encuentro europeo impide a la plantilla madridista pensar en el clásico. Todos insisten en que la mente está en Liga de Campeones. Será Guti el único jugador que se pierda el partido por lesión. Pellegrini ha dejado fuera por decisión técnica a Metzelder, Gago y Van Nistelrooy.

La visita al Bernabéu es especial para el equipo suizo, apoyado por 2.000 aficionados.