"Lo tengo claro: éste es el año". Ya se sabe que el verano es tiempo de optimismos e ilusiones en el deporte con vistas a la nueva temporada, pero a Fermín Naranjo se le ve especialmente motivado con el club que preside desde hace casi 20 años: el Forma Cáceres 2016, la antigua Asociación Deportiva Extremadura de Fútbol Sala. El ascenso a la División de Plata de este deporte aparece como un objetivo irrenunciable y prácticamente obligado.
El desembarco del patrocinador a mediados de la temporada pasada le ha cambiado la cara a la entidad, a menudo lastrada por el desvanecimiento de un pasado glorioso que incluía una histórica presencia en la máxima categoría. Después llegaron cuatro descensos casi consecutivos. Ahora es tiempo de resurgir, según Naranjo, que ha podido hacer una planificación seria ya atisbada hace unos meses, cuando llegaron Masa, Carlos Sierra y Luisfer. A ellos se les unirán los fichajes de Quique Barroso y Adrián Larios y la recuperación del local César Serrano, lo que unido a la continuidad de los mejores de casa (Mario, Chris, Figueroa, Bole...) le da al técnico Antonio Salguero una plantilla teóricamente favorita en Primera ´A´.
Con presión
"Tenemos que subir este año", agrega el presidente, sin eludir la presión. Argumenta que la inminente reestructuración del fútbol sala nacional hará el objetivo mucho más difícil la temporada 2006-07. Y también apela a las sinergias que pueden recuperar a su deporte como referente en la ciudad. "El deporte alternativo de Cáceres es el fútbol sala, como ocurre en otros lugares similares", opina. En su opinión, lograr que "2.000 o 3.000 personas" acudan al multiusos no es ninguna utopía y recuerda que en el España-Eslovenia en el mismo recinto hubo un lleno casi inédito (6.000 espectadores).
Crear el mismo escenario que hace unas temporadas, cuando la generación de oro de jugadores locales liderada por Javi Sánchez se alió con foráneos de calidad, aparece como posible. "El cambio fundamental ha sido tener un espónsor. Forma dice que ha recibido de nosotros más de lo que esperaba. El club también vive gracias a las instituciones, sobre todo el ayuntamiento", asume Naranjo, que, eso sí, no está nada contento con que el gobierno municipal haya reducido la ayuda la pasada campaña. "Aún estoy esperando una explicación del concejal de Deportes", se lamenta.
La temporada tendrá otro ingrediente: la presencia en el grupo de Primera ´A´ de compañero de viaje : el recién ascendido Inesa Zorita. "Nos viene muy bien estimular una rivalidad y que el fútbol sala se desarrolle en otros puntos como Badajoz", destaca Naranjo.
El equipo de la esperanza empezará a entrenar este miércoles con el arranque liguero previsto para el 16 de septiembre. Antes, el Trofeo Cáceres Patrimonio será una buena prueba frente al Córdoba.
