El equipo europeo necesitaba 5 puntos en los 12 partidos individuales que cerraron atípicamente en un lunes (por las fuertes lluvias caídas el fin de semana en Gales) la 38 edición de la Copa Ryder, y sumó justamente esos 5 puntos. Pero no sin un enorme sufrimiento y la emoción que ha dado a este torneo la merecida fama que ostenta. Hasta el último partido, casi hasta el último hoyo, no se decidió la victoria del combinado de Colin Montgomerie sobre el de Estados Unidos, que luchó como una fiera para enjugar la desventaja de tres puntos (9,5 a 6,5) con que inició la jornada en el club Celtic Manor de Newport.

A falta de concluir el último partido, el equipo de Corey Pavin había conseguido situar la igualada en el marcador (13,5 a 13,5). Stricker, Dustin Johnson, Overton, Woods, Mickelson y Zach Johnson arrasaron en sus emparejamientos. Los empates de Cink (con McIlroy) y del joven de 21 años Fowler contribuyeron a sumar 7 puntos para EEUU. Solo le faltaba 0,5 para empatar. Por Europa, Miguel Angel Jiménez aportó un punto decisivo ante Bubba Watson, lo mismo que los ingleses McDonald y Poulter sobre Furyk y Kuchar.

Todo quedaba pendiente del partido entre McDowell y Mahan. El primero sentenció en el hoyo 17 danto la victoria a Europa.