La gente de Ferrari está indignada. Algunos, entre los que se encuentra Fernando Alonso, que primero los acusó de hacer trampas y ahora los señala como insolidarios, culpan a la scuderia del escándalo.

"Chi di gomme ferisce, di gomme perisce" fue la frase utilizada por Luca di Montezemolo, presidente de la marca del cavallino , cuando fue interrogado por la crisis. La frase, versión del "quien a hierro mata, a hierro muere", hace referencia a lo mucho que se han burlado los equipos que calzan Michelin de los problemas que tiene Ferrari con sus Bridgestone, malos en la calificación e irregulares en carrera.

"Nosotros sabemos lo que es sufrir con los neumáticos", señaló Jean Todt, máximo responsable de la escudería italiana. "Jamás se nos ha ocurrido pedir que cambien las normas o la fórmula para calificarse, simplemente nos adaptamos y trabajamos para superar los problemas que tenemos", explicó, terminando con una pregunta: "¿Nos hubieran ayudado si el problema hubiese sido exclusivamente nuestro? Las reglas están para cumplirlas", añadió.