La Liga ACB 2007-08, aparte de la convulsa situación previa por el caso del estadounidense del Tau Will McDonald, trae este año un ligero pero trascendental cambio en el sistema de competición, ya que la primera fase del campeonato otorga un pasaporte directo para la Euroliga.

El campeonato español adolecía hasta ahora de un premio al final de la primera ronda. Se salvaban los diecisiete primeros partidos, que son la mitad del calendario, gracias al interés especial que supone decidir la parrilla de la Copa del Rey, el torneo de clubes de este tipo más atractivo de Europa. Todo el mundo quiere ir a la Copa.

La lucha por las ocho primeras plazas, por el visado copero, anima la primera vuelta, la hace emocionante. Pero faltaba una inyección de músculo a la segunda mitad, que esas diecisiete jornadas restantes hasta las series por el título fueran algo más que una mera toma de posiciones -con la importancia que tiene- para los ´play-offs´ y la agonía del descenso. Y todo el mundo quiere ir también a la Euroliga.

VEINTICINCO ANIVERSARIO La Liga ACB va a cumplir veinticinco años, pues, con más emoción todavía. El nuevo sistema refuerza la espectacularidad de la recta final del campeonato. El ganador de la primera fase, o sea, el que corone los 34 partidos de la denominada ´fase regular´ en primer puesto, tendrá un puesto en la Euroliga.