En Liverpool sí hay playa, pero en Anfield no habrá más pelotas playeras. Después de que un balón hinchable perdido en el área costara la derrota ante el Sunderland, la directiva red ha desterrado de su templo a uno de sus productos promocionales. La policía tiene la consigna de perseguir y confiscar toda pelota playera que se intente colar en Anfield en el partido ante el United hoy.