Atlético de Madrid: Franco; Molinero, Perea, Pablo, Antonio López; Gronkjaer, Luccin, Ibagaza, Colsa (Núñez, m. 35), Jorge (Salva, m. 54); y Torres.
Levante: Mora; Pinillos, Culebras, Alexis, Jesule; Ettien, Tito (Celestini, m. 82), Rivera, Camacho, Nacho (Juanma, m. 37); y Congo (Manchev, m. 66).
Arbitro: César Múñiz, del Comité Asturiano. Mostró tarjeta amarilla a Culebras (expulsado, en el 17) y a Manchev y Rivera, por el Levante, y en el Atlético a Perea y Molinero.
Incidencias: Vigesimotercera jornada del Campeonato Nacional de Liga. 55.000 espectadores en las gradas del Vicente Calderón. Un parte de los aficionados mostraron en los minutos 15 y 30 cartulinas en contra de la venta del Calderón y corearon lemas en contra de la misma.
El Atlético de Madrid volvió ayer a la tierra, tras su triunfo en el Camp Nou hace una semana, ante un Levante, que jugó con diez desde el minuto 17 y en algunos momentos dominó al conjunto local.
El Vicente Calderón presentaba un lleno para recibir al equipo que venció al líder de la Liga, el Barcelona, pero pronto se dio cuenta de que el encuentro de ayer iba a ser, si cabe, más complicado que el disputado en el estadio azulgrana.
Los delanteros locales no pudieron con la firme y consolidada zaga de los levantinos y se perdieron en un fútbol romo y sin profundidad que les condujo a perder dos puntos que les hubieran dado la tercera victoria consecutiva, tras las logradas ante el Albacete y Barcelona.
El Atlético no supo aprovechar en el primer tiempo la temprana expulsión del central Culebras, por doble amarilla al derribar a Torres en los minutos 4 y 17, y apenas creó peligro con la grada centrada, en parte, en la protesta en contra de la posible venta de su estadio.
El Levante, que llegaba al Calderón con su entrenador, el que fuera jugador rojiblanco Bernd Schuster, cuestionado, no dio sensación de jugar con diez y llegó al área tanto como su rival.
En el minuto 13, Franco se tuvo que emplear a fondo para desviar una falta de Alexis; y en el 38 para desbaratar una opción de Congo y Juanma, que dispararon en dos ocasiones consecutivas a puerta dentro del área local para que de nuevo se luciera el guardameta argentino.
El cambio de Colsa, sustituido por el uruguayo Núñez, un delantero más para aprovechar la superioridad numérica, crispó al público que pitó al entrenador local, César Ferrando.
Núñez, precisamente, tuvo una ocasión con un disparo desde la izquierda, al filo del descanso, tras recibir un pase de Ibagaza, que paró el portero Mora.
AL ATAQUE Ferrando sacó un delantero más, Salva, por Jorge, y el murmullo de desaprobación creció en la grada. Sólo mediada la segunda parte, Pablo, de cabeza, envió un remate a la salida de una falta a las manos de Mora. El juego de ambos conjuntos era pésimo, si bien el Levante tenía la excusa de un jugador menos. Schuster buscó mayor capacidad rematadora al sacar a Manchev, pero no la encontró.
En el minuto 81, Salva tuvo en sus botas dentro del área pequeña la ocasión más clara del Atlético al enviar al larguero un balón que había rechazado Mora a disparo de Torres.
La estrella rojiblanca envió, en el 85, otro balón fuera, que a la salida de un saque de esquina nadie había acertado ni rematar ni despejar.
