Los técnicos del Barcelona se plantean endurecer la disciplina de la plantilla y dejar atrás su política de los últimos años, contraria a sancionar a los jugadores en casos de salida de tono y partidaria de resolver los problemas en el vestuario. Uno de los entrenadores azulgrana, Eusebio Sacristán, confirmó ayer que las pautas de juego en estos momentos dan a entender que "igual algo no funciona y quizá haya que buscar otra forma" de gestionar al equipo. Eusebio explicó que la opción que se baraja pasaría por "cambiar la dinámica y exigir más", después de unos años en los que se ha funcionado confiando en la "la libertad y responsabilidad de cada uno".