Las entidades financieras acreedoras de Martinsa-Fadesa están realizando provisiones extraordinarias para evitar que el concurso voluntario de la inmobiliaria afecte a sus cuentas de resultados. Los tres grupos que acaparan la mitad de la deuda --Caja Madrid, La Caixa y Banco Popular-- anunciaron ayer la dotación de 542 millones de euros para cubrir los impagos.
Las normas del Banco de España obligan a las entidades a provisionar hasta el 25% de la deuda. Fuentes de Caja Madrid indicaron que Martinsa le debe 1.000 millones, con lo que la entidad ha decidido destinar 250 millones de sus provisiones genéricas a cubrir el riesgo de impago.
SIN REPERCUSIONES La entidad madrileña aseguró que la operación no tendrá impacto en sus resultados, gracias a sus más de 1.000 millones de euros en exceso de provisiones. La caja estimó que es posible llegar a "una solución razonable, dada la calidad de los activos" de Martinsa. Pero advirtió de que son "realistas: hay un sindicato de bancos amplio, la deuda es importante, las garantías también".
La Caixa, a la que la inmobiliaria debe otros 1.000 millones, anunció una dotación específica de 192 millones con cargo a resultados. El Popular, con 400 millones de deuda, provisionará 100 millones, procedentes de plusvalías del primer semestre.
