Los economistas aseguran que el Sureste Asiático es actualmente la mayor oportunidad de negocio para las empresas occidentales. Solo hace falta ver las cifras de crecimiento económico de países como China e India (cercanas al 10% anual), cinco veces la media de la zona euro. El empresariado español, sin embargo, le da la espalda a la región más prospera del planeta, al menos de momento. De las más de medio millón de empresas extranjeras allí instaladas, apenas 200 son de capital español (el 0,04%).

El empresariado español no tiene entre sus prioridades el mercado asiático. "Del total de inversiones españolas en el extranjero, apenas el 1% se destina a Asia, cuando países como Alemania dedican entre el 20% y el 30%", revela el economista Jacinto Soler, director de la oficina en Barcelona de Hispachina Consulting. "Asia es un continente olvidado por el empresariado español en comparación con otras regiones como Latinoamérica. La presencia de sectores fuertes como el hotelero, la banca y los servicios es casi testimonial o nula", añade el experto.

El profesor del departamento de Economía de Esade Josep Sayeras corrobora estas conclusiones: "Asia, por el momento, no es relevante para las empresas españolas porque no tienen mercado porque este está en Europa y Suramérica, supongo que por afinidad cultural y porque, a diferencia de Francia y Alemania por ejemplo, España no dispone de grandes empresas con recursos suficientes" para emprender una aventura tan complicada como la asiática. "Hace 10 años, además, nadie podía pensar que China y la India iban a tener el crecimiento que han tenido estos años", añade el profesor.

Zona de riesgoOtro experto en la región, el director del área de internacionalización empresarial de la Cámara de Comercio de Barcelona, Josep Maria Cervera, discrepa "porque los ciclos históricos son los que son y de la misma manera podría decirse que muchos países han descuidado, por ejemplo, el continente suramericano". "El continente asiático --añade-- es muy atractivo por su alto crecimiento, pero también es de alto riesgo, puesto que es una zona de cierta inestabilidad política".

Según Cervera, España todavía está a tiempo de subirse al carro asiático: "Hay empresas en sectores estratégicos, como Telefónica, Repsol y Aguas de Barcelona, implantadas en Latinoamérica, donde se concentra la mayor parte de las materias primas del planeta. China ya mira hacia esta zona para buscar lo que necesita para producir. Y ahí es donde se pueden buscar alianzas".

La empresa de consultoría Everis y la Casa Asia presentaron esta semana un estudio según el cual la mayoría de los empresarios encuestados destacaron que la razón para instalarse en Asia no era la simple reducción de costes laborales, sino la búsqueda de nuevos mercados. "No van a producir, sino a vender", dijo la autora del estudio, Lijing Ye. Y las posibilidades son muchas: los expertos calculan que el gasto en China se quintuplicará en los próximos 10 años y acaparará el 20% del mercado mundial de artículos de lujo.