Los excesos se pagan en un mercado pendular como el actual. El Ibex 35, el principal indicador del mercado español, cae a media sesión casi el 5%, una jornada después de que el índice registrara la mayor subida de su historia: el 14,43%.
De igual forma, los títulos que más destacaron al alza en la sesión precedente, registran los descensos más abultados. Los grandes bancos y Telefónica --el valor que mayor peso tiene en el indicador-- contabilizan caídas de entre el 4% y el 6%.
La recogida de beneficios ha provocado que el Ibex haya perdido la resistencia de los 10.000 puntos, lo que ha originado una profundización de las pérdidas, en un movimiento más o menos habitual de recogida de beneficios, tras un subida tan espectacular como la ayer.
El parquet español se mantiene así a la cabeza de las pérdidas en Europa con bastante diferencia. El Eurostoxx 50, donde cotizan los valores más capitalizados de Europa, registra un descenso del 1,7% y el DAX de Fráncfort se mueve a la baja, el 1,2%.
La caída de los mercados de renta variable no es secundada, sin embargo, por la renta fija, donde el diferencial del bono español con el alemán se mantiene igual que ayer en 108 puntos. Incluso la rentabilidad de la deuda soberana española desciende al 3,98%.
De igual forma, la deuda griega se mantiene en niveles similares a los alcanzados ayer (el 7,4%) después de conocerse el plan de emergencia aprobado el domingo por la Unión Europea.
La mayor tranquilidad del mercado de deuda no se refleja, sin embargo, en el de dividas, donde el euro desciende a los 1,26 dólares, tras situarse ayer el cambio oficial del Banco Central Europeo (BCE) en los 1,29 dólares. "La situación de euro no debe preocuparnos demasiado. Su valoración actual todavía está por encima de los que le corresponde", comenta Jaume Puig, director general de GVC Gaesco.
