La OPEP, el cártel exportador de petróleo, decidió ayer en Beirut incrementar en un 8,5% su cuota de producción diaria, hasta los 25,5 millones de barriles a partir del próximo 1 de julio. Esta medida, que incorpora dos millones de barriles a la oferta oficial diaria de esta organización y significa el mayor aumento decidido por el cártel desde 1997, decepcionó inicialmente en los mercados, pese a que tenía como objetivo rebajar el actual nivel de cotizaciones, que ha llegado a alcanzar cotas históricas.

El barril de Brent, la calidad de referencia en Europa, volvió a subir hasta situarse por encima de 37 dólares, pero después empezó a descender hasta moverse entre 35 y 36 dólares, con un descenso que superó el 6%. Finalmente cerró a 36,35 dólares.

En el mismo encuentro, la 131 reunión extraordinaria de la OPEP acordó aportar 500.000 barriles diarios más a la oferta del cártel, (casi un 2%), hasta llegar a 26 millones a partir del 1 de agosto. Esta medida situará la producción de la organización en el nivel que defendía Arabia Saudí, el principal socio y que significaba un recorte de más del 11% con respeto a las cuotas pactadas desde el pasado 1 de abril. El cártel celebrará el 21 de julio una reunión extraordinaria para analizar la evolución del mercado. En su comunicado final, la OPEP invitó también a los países que no forman parte de la organización a "llevar a cabo las medidas necesarias" para contribuir a reducir el precio.

El factor que más incidió en la bajada de la cotización provino de EEUU, que nformó de que las reservas de gasolina se incrementaron en la última semana y que las importaciones de crudo las elevaron hasta los niveles de agosto del 2002. La primera potencia mundial vive desde hace semanas un fuerte encarecimiento de las gasolinas, que han superado la cota de los dos dólares por galón, derivado de la subida del petróleo, y la debilidad de la divisa nacional.