Algo muy apreciado por los trabajadores es sentirse orgullosos de su empresa. En este intangible se incluye la ética, el compromiso con el medio ambiente y su implicación con la sociedad. Es decir, todo lo que influye en la imagen de la marca. Pero también hay cuestiones tan sutiles como el respeto a la igualdad y a la diversidad cultural, la no discriminación, la integración laboral de los discapacitados o el apoyo a la cultura y a la innovación.