Los productos ecológicos comienzan a hacerse un hueco en las preferencias de los consumidores, y su producción y comercialización se plantean como una actividad de futuro. Además, la alta fidelización del cliente, cuyo consumo está unido a un estilo de vida, hace que apenas esté notando la crisis. La Feria Ibérica de la Alimentación organizó ayer un seminario sobre Exportación de productos ecológicos . En ella los participantes pudieron conocer de primera mano el análisis de la demanda de estos productos en Alemania, donde el 30% de la población es consumidora de alimentos ecológicos y uno de los principales consumidores de Europa.

Extremadura actualmente es la tercera región española en la producción de este tipo de alimentos, después de Andalucía y Aragón. Los productos que más se comercializan es el aceite de oliva aunque se va abriendo a otros sectores como las almendras o los dulces caseros, informó Pedro Jara, director general de Comercio, presente en esta cita. "La industria de transformación tiene cada vez más peso específico; hemos pasado de tener hace 10 años unas docena de empresas que hacían transformación de productos ecológicos, a unas 72 según los últimos datos que son del 2006".