El ritmo de altibajos se mantiene en los mercados. Las pérdidas se impusieron en las bolsas y se agravaron al cierre. El Ibex 35 se dejó el 2,17%, hasta los 11.739 puntos. El mercado desconfía de la situación del sector financiero y los resultados empresariales. Los vaivenes también se vieron alentados por la falta de datos o indicadores que ayuden a las bolsas a tomar una dirección definida: capitulación o recuperación.

En ese entorno de incertidumbre, que se mantiene por demasiado tiempo, según los analistas, en el Ibex 35 solo tres valores concluyeron sin números rojos. Grifols mejoró el 2,7% y Criteria, el 0,27%. Banesto cerró plano en la sesión en la que presentó unos resultados mejores de lo esperado, pero con un incremento de la morosidad contundente: dobló el del primer trimestre. En todo caso, dominaron las pérdidas. Sacyr Vallehermoso bajó el 6,4% y Gamesa, el 4,7%. Otra constructora que restó posiciones fue Ferrovial, con el 3,8%. El Popular cedió el 3,5%. Entre los grandes valores, el BBVA se dejó el 3,2%; Iberdrola, el 3,1%; Repsol, más del 3%; Telefónica, el 1,47% y el Santander, el 1,8%. Por lo que respecta a los datos macroeconómicos, la producción francesa sufrió la mayor caída en tres años. En España, al margen de las dudas sobre si se está o no en recesión, los precios de importación subieron hasta el 9,3%. Prácticamente todas las grandes plazas bursátiles europeas recogieron pérdidas abultadas. El FTSE 100 de Londres bajó el 2%; el CAC de París, el 1,5% y el mismo porcentaje para el DAX alemán. El Eurostoxx 50 retrocedió el 1,7% hasta los 3.280 puntos. La metalúrgica Arcelor Mittal lideró los ascensos, con el 1%.

Por detrás, Credit Agricole, con el 0,55%, e Intesa San Paolo, con el 0,41%, tras recibir una buena recomendación de Chevereux. Carrefour se dejó el 8,5%. El precio del crudo remontó al cierre. Los futuros del Brent escalaron el 1,4%, hasta los 138,8 dólares, mientras que los del West Texas sumaron el 0,9% (137,36 dólares).