El superávit comercial chino sigue disparado a pesar de las medidas correctoras de Pekín y la presión agobiante que ejerce Washington. La cifra en julio fue de 24.400 millones de dólares. El dato se interpreta de formas opuestas. EEUU subraya que el superávit de este julio es un 66% mayor que el del año anterior. Julio es, además, el segundo mes de este ejercicio con mayor desequilibrio comercial. Durante este tiempo, el superávit acumulado alcanza ya los 136.817 millones.
Pekín dice que fue precisamente junio el mes con mayor desequilibrio, con 26.900 millones. De esa forma, el superávit de julio no deja de ser un 10% menor que el de junio, lo que certificaría el inicio de un cambio de tendencia. China fomenta el consumo interno, desincentiva las exportaciones de bajo coste e incentiva las tecnológicas para conseguir un crecimiento más maduro, aunque eso le reste algunos puntos.
Los expertos dicen que esta supuesta caída del superávit se debe a que el volumen de junio fue extraordinario porque muchos fabricantes aceleraron sus exportaciones por miedo a cambios legislativos. El Senado de EEUU ha amenazado con trabar las importaciones chinas si Pekín sigue su política monetaria.
