El número de trabajadores afectados el año pasado por expedientes de regulación de empleo (ERE) prácticamente se triplicó en comparación con 2007, una subida que fue aún mayor en el caso de Aragón, donde se sextuplicó, y Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana, con cuatro veces más.

Así lo constatan los últimos datos del Ministerio de Trabajo a los que ha tenido acceso Efe, que especifican que en el año 2007 se vieron afectados 58.401 trabajadores por ERE, una cifra que en 2008 se elevó hasta los 147.470, un 152,5 por ciento más.

Por culpa de la crisis económica, los expedientes de regulación de empleo se fueron incrementando progresivamente cada mes del año pasado, hasta alcanzar su cifra más elevada en diciembre.

Una tendencia que se ha mantenido en enero de este año en Andalucía, Aragón, Castilla y León, Cataluña, Extremadura y Navarra, en tanto que en el resto de autonomías se han reducido los empleados con ERE en el primer mes de este año.

Todas las comunidades autónomas experimentaron en 2008 un aumento del número de asalariados que perdieron su puesto por este tipo de situaciones, con una media de aumento del 152,5 por ciento.

El mayor volumen de trabajadores con expediente de regulación se empleo se registró en términos absolutos en Cataluña, con 30.055 (frente a los 7.751 del ejercicio anterior), seguida de la Comunidad Valenciana, con 27.617 (6.813 en 2007) y Castilla y León, con 13.283, cuando un año antes habían sido 10.621. De hecho, estas tres comunidades suman el 48 por ciento de todos los trabajadores que perdieron su empleo el año pasado debido a una regulación.

Mientras tanto, además de las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, las regiones con menos asalariados afectados fueron Extremadura, con 613 (293 un año antes), La Rioja, con 791 en 2008 (367 en 2007) y Baleares, con 826 (387).

Sin embargo, en términos relativos, el mayor incremento fue el de Aragón, donde en un año se multiplicaron prácticamente por seis los empleados con ERE, al pasar de 2.090 a 11.806 (una subida del 484,8 por ciento).

Igualmente, en Castilla-La Mancha vio aumentar cuatro veces el número de trabajadores con ERE (de 933 en 2007 3.853 en 2008, un 312,9 por ciento más), así como en la Comunidad Valenciana (de 6.813 a 27.617 en 2008, con un incremento del 305,3 por ciento) Castilla y León y Asturias, por el contrario, fueron las comunidades en las que menos se elevó la cifra de asalariados con ERE, con aumento del 25 y del 25,7 por ciento, respectivamente.