En mil millones de dólares (más de 750 millones de euros) ha cifrado la compañía de productos televisivos y cinematográficos Viacom el daño que le supone YouTube. Al menos, esta es la cantidad que exige a la web de vídeos y a sus actuales dueños, Google, en una demanda que presentó ayer en un juzgado de Nueva York por "hacer caso omiso de forma descarada" de las leyes de propiedad intelectual. Según Viacom, 160.000 vídeos de su producción están o han estado disponibles en YouTube y han sido vistos más de 1.500 millones de veces.

La demanda es otra etapa más del torbellino cultural, económico y legal que ha generado la imparable popularidad y crecimiento de esta web, en la que los usuarios comparten vídeos, tanto caseros como --y ahí radica el quid de la cuestión-- grabados de la tele o de un DVD. Según acusa Viacom --propietaria de la MTV, VH1, Nickleodeon y Comedy Central, entre otros canales, y que produce programas tan populares como South Park y Bob Esponja --, "el negocio de YouTube se basa en aumentar el tráfico de su página y vender publicidad a partir de contenido sin licencia, lo que es claramente ilegal y entra en un obvio conflicto con las leyes del copyright ". "El resultado es que YouTube aprovecha la tecnología para acometer una masiva vulneración de los copyright y desposeer a los autores de los beneficios que les corresponden" .

En un comunicado, Google --que compró YouTube el pasado año por 1.350 millones-- afirmó que confía en que el tribunal falle que la web "respeta los derechos legales de los propietarios del copyright " y añadió que "no permitirá que la demanda se convierta en una distracción para el continuo crecimiento y fortaleza de YouTube". Una forma de decir que Viacom intenta poner puertas al campo digital. Según The New York Times , en enero YouTube tuvo 133,5 millones de visitantes, frente a los 9,5 millones registradas en enero del pasado año.