El Ministerio de Asuntos Exteriores espera recibir a partir de hoy alrededor de un millón de solicitudes para la adquisición o la recuperación de la nacionalidad española. Esta avalancha es la consecuencia de la entrada en vigor de la reforma del Código Civil en esta materia.

El Gobierno calcula que cerca de 400.000 solicitudes pueden proceder de Argentina; 100.000, de México; otros 100.000, de Venezuela; 80.000, de Brasil; una cifra similar, de Cuba; 60.000, de Chile; y 50.000 solicitudes, de Uruguay.

Para afrontar este volumen de peticiones, el ministerio reforzará con 90 nuevos contratados los consulados de España en Buenos Aires, Caracas, Montevideo, Sao Paulo, La Habana y México, de los que 46 se incorporarán a sus puestos hoy mismo.

REFUERZO DE LA RED CONSULAR

El resto de contratados se distribuirá entre diferentes destinos en función de las necesidades, al igual que 17 funcionarios especializados en cuestiones de nacionalidad, mientras que las representaciones españolas en Buenos Aires, Montevideo, Sao Paulo y México contarán con un cónsul general adjunto. Asuntos Exteriores, que proyecta completar este reforzamiento de la red consular el año próximo con un total de 24 nuevos funcionarios y 143 contratados locales, ampliará asimismo con un edificio adicional el consulado en Buenos Aires y reacondicionará las instalaciones de Caracas, Montevideo, México y La Habana.

Igualmente, se han adoptado medidas para mejorar la informatización de los consulados, ampliar los horarios de atención al público y facilitar la información y el acceso de los solicitantes a los servicios consulares a través del correo electrónico.

La reforma del Código Civil que entra hoy en vigor fue aprobada por el Senado el pasado 25 de septiembre. La norma prevé que puedan recuperar la nacionalidad los españoles que por razones diversas se han hecho ciudadanos de otro país --caso de muchos exiliados--, y los hijos de padre o madre españoles que nacieron en el exterior y la perdieron al llegar a la mayoría de edad.

Una de las principales novedades es que los hijos de cualquier ciudadano español heredarán esta condición, y también la adquirirán los nietos de españoles que demuestren una residencia legal de un año en España.