Los incidentes jalonaron la jornada de ayer en Euskadi. La violencia callejera, recrudecida en los últimos días, se centró sobre todo en sedes del PNV y hubo enfrentamientos en Vitoria y otras localidades vascas entre policía y manifestantes, en solidaridad con los dos presos de ETA muertos en la cárcel.

Los desórdenes de media mañana en el barrio de Zaramaga de la capital alavesa tuvieron como protagonistas a cerca de 200 jóvenes, que la emprendieron con los agentes cuando se les advirtió que el acto de apoyo a los presos fallecidos estaba prohibido. Los objetos lanzados por los manifestantes produjeron heridas leves a dos ertzainas, que detuvieron a uno de los jóvenes. La Ertzaintza disolvió también una manifestación en Vitoria, convocada en recuerdo de las víctimas policiales del 3 de marzo de 1976, pero en la que se gritaron consignas de apoyo a ETA. El balance fue de un detenido y tres heridos.

La sede del PNV en el barrio de Zaramaga centró el enfado de los radicales. También los batzokis de Algorta, en el municipio vizcaíno de Getxo, Santurtzi y Portugalete, fueron apedreados.

El Departamento vasco de Interior había anunciado la prohibición del acto convocado para esta tarde en Santurtzi, localidad natal de Igor Angulo, pero, tras el comunicado de ETA y visto el ambiente, la consejería declaró prohibidos todos los actos de homenaje a Igor Angulo y Roberto Sainz en próximos días.