La elaboración de tres programas electorales en el plazo de un año --municipales, generales y europeas-- ha hecho mella en los ideólogos del PSOE. La ponencia marco del 36º congreso socialista, de apenas 60 páginas, se limita a refrendar la gestión de José Luis Rodríguez Zapatero al frente del partido y su programa de investidura. La euforia por el vuelco electoral del 14-M ha relegado a un segundo plano el debate ideológico.
Salvo un texto del PSC, que rechaza que la reforma de los estatutos tengan que ajustarse al "marco de la Constitución", la inmensa mayoría de las 1.518 enmiendas presentadas por las federaciones del PSOE aporta pocas novedades a la ponencia marco.
El informe repasa la historia del partido desde Pablo Iglesias hasta Felipe González. La derrota electoral de éste en 1996 la achaca a "los errores cometidos y deficientemente afrontados". La ponencia critica los ocho años de Gobierno del PP, y la azarosa vida interna del PSOE hasta que Zapatero asumió el liderazgo en el 2000. A partir de ahí, ensalza la "renovación" interna del partido y la "oposición útil".
