Por primera vez en la historia de Euskadi, un lendakari deberá comparecer ante el juez imputado por la comisión de un delito. Será el día 31 cuando Juan José Ibarretxe acuda a la sede del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, en Bilbao, dentro de la querella promovida por el Foro Ermua por su reunión con dirigentes de Batasuna.

La declaración se ha fijado antes de que se resuelva el recurso de apelación que la defensa del lendakari presentó contra la denegación del archivo de la causa.

La portavoz del Ejecutivo vasco, Miren Azkarate (PNV), volvió a censurar la actuación del juez instructor, Roberto Saiz, que accedió a la Sala de lo Civil y Penal a propuesta del PP. Denunció que solo ha tenido en cuenta la opinión del Foro Ermua, ignorando que el fiscal se pronunció a favor del archivo y que el Supremo desestimó actuar contra Zapatero por promover contactos con el mundo aberzale.

Además de Ibarretxe, en la causa están imputados Arnaldo Otegi, Pernando Barrena y Juan José Petrikorena, que fueron los interlocutores del lendakari en la reunión del 19 de abril. El Tribunal Superior todavía no ha resuelto si archiva la denuncia del PP y la querella del Foro Ermua contra los dirigentes del PSE Patxi López y Rodolfo Ares por reunirse con Otegi el 6 de julio.

TRASCENDENCIA La declaración de Ibarretxe abrirá, tras el atentado de Barajas, una serie de actuaciones de gran trascendencia que pondrán de nuevo a prueba las difíciles relaciones entre los poderes judicial y legislativo.

Pocos días después, el 8 de febrero, se podría conocer la decisión del Supremo sobre el caso Jarrai-Haika-Segi . La sentencia sentará jurisprudencia para muchas causas abiertas contra el llamado entorno de ETA.