La Oficina del Defensor del Soldado está recibiendo quejas del grupo de 1.300 efectivos españoles que partirán en los próximos días hacia Irak para participar en la seguridad y la reconstrucción de dos provincias del cuadrante centro-sur. El portavoz de esta organización, Carlos García, denunció ayer que familiares de militares españoles se quejan por la "sobrecarga de trabajo" a la que está sometido el colectivo, que "encadena misiones internacionales" sin suficiente tiempo de descanso.

García aseguró que estas protestas se suman a las que se vienen produciendo desde que se inició el proceso de profesionalización del Servicio Militar, y explicó que son el resultado del aumento de la participación española en misiones internacionales, combinado con el escaso número de efectivos que se incorporan a la tropa profesional. "Hay menos de 70.000 soldados profesionales operativos --repasó García--, cuando para estas alturas se manejaban cifras próximas a los 120.000".

"ATENCION Y MIMOS"

Defensa respondió ayer restando "credibilidad" a la Oficina del Defensor del Soldado, de la que recordó que "nació cuando la mili era obligatoria". Fuentes del ministerio que dirige Federico Trillo aseguraron que ahora las tropas "tienen otros canales de comunicación", en referencia a la "cadena de mando", y añadió que a los soldados "se les atiende y se les mima" para "no perderlos".

El portavoz del Defensor del Soldado, en cambio, destacó que las quejas que escuchan en su oficina demuestran "la desconfianza y el enojo" que se están apoderando de la tropa profesional, porque "cada vez se les exige más y cada vez son menos". García recordó que, además de las misiones internacionales, los militares profesionales son requeridos para ayudar a paliar los efectos de desastres naturales como la catástrofe del Prestige . Por eso, explicó, en los últimos meses arrecian las consultas sobre cómo "darse de baja" antes de finalizar el compromiso inicial de tres años que los soldados profesionales firman con el Ejército.

También denunció que la tropa española trabaja "sin cobertura" y que los soldados "quedan en la calle" cuando regresan de sus destinos con "algún percance de salud".

ANSIEDAD Y DEPRESION

García explicó que los militares que contraen enfermedades durante las misiones, tanto físicas como psíquicas --crisis de ansiedad y depresión son las más comunes-- son calificados a la vuelta como "aptos para el servicio con limitaciones" y "ya no se les renueva". El portavoz del Defensor añadió que esa "injusticia" explica el aumento del "descontento" entre los soldados.

Por otra parte, Manuel Atencia, portavoz de defensa del PP, confirmó que los servicios de inteligencia investigan la zona iraquí que recibirá tropas españolas. Atencia dijo que la presencia de espías es algo "lógica y normal".