La agencia oficial de noticias marroquí MAP rebajó ayer a cuatro el número de fallecidos a ambos lados de la frontera de Ceuta en la avalancha de la madrugada del jueves. Las primeras informaciones hablaban de tres muertos en el lado marroquí, pero en el Hospital Saniat Rmei de Tánger, donde ingresaron los heridos y fallecidos, sólo hay dos cadáveres.

La confusión puede proceder de la existencia de un herido en "estado crítico" que había recibido "varios disparos en la cara", según la misma agencia. Otros cinco heridos atendidos en el hospital presentaban también heridas de bala. Las autopsias de los dos fallecidos en el lado marroquí aún no se han iniciado. Aunque presuntamente murieron por disparos, no habrá confirmación hasta que acabe el análisis posmortem.

Las investigaciones para determinar quiénes fueron los autores de los disparos apenas avanzaron. El delegado del Gobierno, Jerónimo Nieto, ratificó la versión de la Guardia Civil el día antes en la que afirmaba que sólo había usado "material antidisturbios".

El ministro del Interior no se pronunció; pero destacó la confianza del Gobierno en la "magnífica labor de la Guardia Civil".