ETA anuncia en su último comunicado que está dispuesta a estudiar conjuntamente con los mediadores "los pasos necesarios para una solución democrática al conflicto vasco", incluidos los compromisos que debe adoptar la propia banda. El extenso comunicado fue publicado ayer en los diarios Gara y Berria. El texto, íntegramente en euskera, comienza con un significativo mensaje a los mediadores internacionales: "ETA quiere expresar mediante este comunicado su respeto y agradecimiento hacia los hombres y mujeres que firmaron la Declaración de Bruselas el pasado marzo del 2010. ETA considera lo que se cita en ella como aportación a tener en cuenta. Por lo tanto, queremos informar sobre nuestras reflexiones a los firmantes de la Declaración de Bruselas y, en general, a la comunidad internacional".
El comunicado dedica seis largos párrafos a narrar, como es habitual en este tipo de documentos, la particular visión etarra de la historia de Euskal Herria. Ni siquiera falta una alusión al Gernika de Picasso como ejemplo de "la cruda represión y violentos ataques" sufridos por el pueblo vasco.
Los terroristas aprovechan para justificar sus 51 años de existencia y el recurso a la lucha armada, que califican como "el único camino que nos han dejado", para hacer frente a los estados español y francés. En ningún caso hacen referencia a los mil muertos y al inmenso dolor que han causado, ni se percibe un atisbo de autocrítica. Unicamente aluden "al terrorismo de Estado, que ha asesinado a docenas de ciudadanos vascos, ha torturado a cientos y encarcelado a miles".
Uno de los pasajes más reveladores es el que admite el anacronismo de los grupos terroristas en Europa: "En el siglo XXI no es fácil hacer entender la lucha armada. Muchas veces es más fácil entender la opresión de los pueblos. Es más aceptable, si no es ruidosa. El ruido es lo que hace daño, más que la propia opresión de los pueblos. Es difícil entender la lucha armada en Europa. Pero, ¿no es aún más difícil de entender el que se niegue a la ciudadanía vasca el derecho a elegir su futuro de forma libre?".
Tras reiterar su decisión de no realizar atentados, responde a la Declaración de Bruselas en tres puntos:
1.- El conflicto que tiene Euskal Herria con España y Francia se basa en profundas razones políticas. Por eso, para superar el conflicto, más allá de pasos parciales, es necesario desarrollar una propuesta que aúne las raíces del conflicto y desate los nudos.
2.- Si el conflicto se va a superar definitivamente, necesita una sólida solución, que se construya con compromisos de muchas partes y se desarrolle mediante conversaciones y negociaciones.
3.- Teniendo en cuenta el compromiso que habéis mostrado respecto a la solución del conflicto, ETA da a conocer su disposición para analizar juntos los pasos que necesita la solución democrática, incluidos los compromisos que deberá adoptar ETA.
Como en anteriores comunicados, ETA alude a los nuevos estados surgidos en Europa en los últimos 20 años "y que han encontrado la aceptación internacional". Cita expresamente los casos de Groenlandia y Escocia, "pueblos que están construyendo su independencia dando cauce a la voluntad de sus ciudadanos". Paradójicamente, la banda pone como ejemplo causas secesionistas en las que no hay uso de las armas, para concluir que "habiendo voluntad política, existe la posibilidad de construir el futuro de los pueblos de manera libre y democrática".
