La Audiencia Provincial de Castellón decretó ayer el sobreseimiento de cuatro de los cinco delitos fiscales de los que está acusado el presidente de la Diputación, el popular Carlos Fabra, al entender que han prescrito. La Fiscalía Anticorrupción recurrirá la decisión. El proceso por un delito fiscal presuntamente cometido en 1999 (el único denunciado por Hacienda), cohecho y tráfico de influencias sigue adelante.

El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, mostró su satisfacción por el archivo de la causa, que calificó de "mala noticia para los fans de los banquillos mediáticos" y "buena para la presunción de inocencia". Un valor que, añadió, encarna "la figura de Fabra", al que dijo considerar un "amigo".