El Constitucional dijo ayer no a las pretensiones de la Generalitat y el Parlamento catalán, que el día antes le habían pedido que se declarase incompetente para dictar la sentencia del Estatut. Los jueces que tienen que firmar este veredicto despacharon en dos líneas el órdago: "No ha lugar a lo solicitado". El tripartito y la Cámara presentaron el pasado miércoles siete escritos en la sede del Constitucional en la que pedían a los jueces que se declararan incompetentes para resolver los recursos.

María Emilia Casas, presidenta del TC, redacta ahora la séptima ponencia del Estatut, después de que el pasado 19 de mayo el anterior ponente, Guillermo Jiménez, retirara su borrador por no haber obtenido ningún apoyo. Casas repitió el pasado miércoles que la sentencia estará "antes del verano".