Arroz, azúcar, cacao en polvo, pasta, galletas, harina, leche, queso y cereales para papillas. Estos son los alimentos que componen el lote que recibirán 38.668 extremeños en la primera fase del plan de ayuda a las personas necesitadas del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino a través del Fondo Español de Garantía Agraria (Fega). Alimentos de primera necesidad derivados de excedentes de la Unión Europea, intervenidos previamente por la PAC, que se vienen repartiendo en España desde hace más de 20 años y que este año llegarán a casi 4.000 extremeños más.

Los bancos de alimentos, encargados de distribuir el mayor contingente, pero también Cruz Roja y Cáritas, solo en Cáceres, ya disponen de 650.000 kilos de alimentos almacenados en cinco centros que se repartirán en la primera de las cuatro fases en las que se divide el programa. El reparto ya ha comenzado. Estas entidades entregan la carga a las 359 asociaciones benéficas de la región adscritas al plan que son las encargadas de hacer llegar estos alimentos a las personas y grupos familiares que más lo necesiten, que este año se han duplicado en algunas zonas. Así lo asegura la presidenta del Banco de Alimentos de Badajoz: "hay un 55% más de personas que precisan esta ayuda", apunta Carmen de Aguirre.

En Cáceres, el presidente del banco, Angel Bernal, asegura que habrán pasado de 6.000 a 7.000 las personas que requerirán estos alimentos, por eso también este año ha aumentado la cantidad concedida por el Fega. En lo que sí coinciden es que la carga ha llegado muy tarde. "Esta comida se reparte cuatro veces al año, más o menos cada trimestre, pero este año vamos a hacer dos entregas prácticamente en un mes", apunta De Aguirre. "Por este retraso es también mayor la demanda", insiste Bernal.

Con este plan se cumplen dos funciones necesarias: canalizar las existencias procedentes de productos intervenidos por la PAC, tras el pago a agricultores, ayudando periódicamente a las personas con más dificultades a salir adelante.

LOS CRITERIOS El Fega planifica el reparto territorial de comida teniendo en cuenta el índice de pobreza de cada comunidad --39% en Extremadura--; la tasa de parados --15,2%--; la inversa del PIB per cápita --16.828 euros por habitante--; y la cantidad de beneficiarios del plan desarrollado el año anterior --34.794 personas--. Con estos datos, a la región le corresponde este año más de 2.300 toneladas de alimentos por valor de 1.816.000 euros, que se distribuirán en junio, otoño y Navidad. De los más de 38.600 extremeños que recibirán alimentos, 28.100 residen en la provincia de Badajoz y 10.500 en Cáceres.

La variedad de artículos a repartir depende de los mercados agrarios y de los excedentes agrícolas que haya en los denominados organismos de intervención europeos. A cada país se le asigna una cantidad de excedentes, se valora económicamente y este importe se emplea para adquirir en el mercado comunitario productos de primera necesidad derivados del excedente. "La UE para que el agricultor no pierda dinero en su producción compra en ocasiones por ejemplo cereales, que intercambia con empresas que transforman estos productos y que resultan adjudicadas previamente", explican desde el Fondo Español de Garantía Agraria. "Este año por ejemplo se disponen de muchos alimentos en intervención pero ha escaseado el arroz". Para ello se ha asignado una cantidad para comprar este producto básico. Además de arroz también se ha adquirido cereales para papilla y para los bebés también habrá leche en polvo de continuación.