El número de mujeres extremeñas que sufren malos tratos en su ámbito familiar ronda las 6.500, según las estimaciones realizadas por el Instituto de la Mujer de Extremadura (Imex). El problema es que el 85% de las maltratadas no llegan nunca a denunciar las agresiones, físicas o psíquicas, por miedo y por la dependencia económica que tienen de su pareja tanto ellas como sus hijos.

A pesar de que el volumen de denuncias por malos tratos se ha disparado en los últimos años en la comunidad autónoma, el Imex considera que en estos momentos sólo llegan a los tribunales 15 de cada 100 casos. Es decir, que aunque a finales del 2002 las extremeñas habían presentado 948 denuncias por maltrato, en realidad son en torno a 6.500 las que en realidad padecen este drama.

La propia directora del Instituto de la Mujer, Josefa Caraballo, es que muchas de las mujeres que sufren este drama no se atreven a dar el paso y denunciar su caso "hasta que ven peligrar sus vidas y las de sus hijos".