El pasado fin de semana se celebró en Cáceres la III Asamblea Regional de la Asociación Profesional de Orientadores de Extremadura (APOEX), en la que se analizó la nueva Ley Orgánica de Educación (LOE) y se empezó a trabajar en la elaboración de una serie de propuestas que sirvan para desarrollar un modelo extremeño de orientación. El objetivo de estos profesionales es mejorar la actual atención que se presta en los centros educativos a los alumnos con problemas y a sus familias, tanto en el asesoramiento académico y profesional como en el personal. Celedonio Salguero preside actualmente esta asociación profesional en Extremadura.

--¿Es necesaria una adaptación de la forma de trabajo del orientador a la nueva ley?

--Estamos trabajando con una reglamentación de hace 20 años y habría que adaptar todo el modelo a la realidad actual de las familias extremeñas.

--¿Los problemas a los que se enfrentan los orientadores han variado mucho en los últimos años?

--Sí, han variado mucho. El mayor cambio que se ha producido ha sido el de la propia sociedad y esto también ha transformado la estructura de la familia, entre otras cosas. Todo ello ha llevado a un cambio en la forma de enseñar y también en la demanda de los alumnos y es necesario que la forma de trabajar en los centros educativos cambie, se adapte.

--¿Debe el modelo extremeño de orientación abrirse a otros?

--Es necesario que los modelos de trabajo que se llevan a cabo en cada región se pongan en común, lo que serviría para enriquecer a todos los profesionales.

--Pero la realidad educativa es distinta en cada región, ¿no?

--Es cierto, es diferente en cada zona, incluso no es la misma dentro de Extremadura. No es lo mismo trabajar en un instituto de Talayuela que en uno del centro de la región, en el norte extremeño se da con mayor fuerza el fenómeno de la inmigración. Pero todo esto supone también que en algunas partes ya existan soluciones a algunos problemas que ahora están apareciendo en otras zonas o que se estén dando soluciones diferentes a problemas parecidos. Por ello es necesario que se sepa cómo se trabaja en otros sitios y que exista una coordinación en la que esté presente también la Administración, a fin de que las respuestas y la atención a alumnos y padres no sean diferentes.

--¿Es suficiente el número de orientadores que trabajan en los centros extremeños?

--(Actualmente hay 250 profesionales ejerciendo estas funciones en la educación extremeña, a los que se sumarán dentro de poco otros 35) El número es insuficiente, más que nada por la forma de trabajar. Los profesionales que trabajan en Primaria sólo acuden un día a la semana a los centros o un día cada quince. Por ejemplo, Castilla-La Mancha ha resuelto este problema poniendo un orientador en cada centro de Primaria. Sabemos que una solución así supone mucho dinero para la Administración, pero también otra solución podría ser aumentar el tiempo de trabajo de cada orientador.