Problemas enquistados, políticas nefastas, talón de Aquiles, desconfianza, desconcierto, errores. Estos son algunos de los calificativos que pueden encontrarse en las valoraciones que los principales sindicatos del sector hacen el inicio del curso escolar. El curso pasado terminó con una amenaza de huelga y los profesores vuelven a las aulas con la misma sensación con la que se fueron de vacaciones y, aunque reconocen avances en los últimos tiempos, consideran que la Consejería de Educación no les presta la suficiente atención.

El Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza (STE-Ex) manifiesta que mientras estos días los alumnos vuelven a las aulas "los problemas educativos en nuestra región siguen enquistándose sin que parezca que haya nadie dispuesto a darle soluciones reales". Los profesores se manifiestan comprometidos con el objetivo de mejorar los resultados de la enseñanza extremeña, pero también advierten que antes deben constatar que la administración también va a poner de su parte. A tenor de las opiniones vertidas en los dos últimos días, parece que este punto de encuentro no pasa por su mejor momento.

Administración y docentes están condenados a entenderse en los próximos meses, ahora que la nueva Ley de Educación entra en su fase definitiva antes de iniciar su trámite parlamentario, fijado para el primer trimestre del 2010, en la que todas las partes implicadas tienen puestas sus esperanzas para encontrar una solución a sus demandas. Entre las quejas vertidas se encuentran reclamaciones históricas, como la reapertura de la Mesa Sectorial de Educación, que lleva dos años paralizada, para renegociar las condiciones laborales de los profesores (carrera profesional, prórroga de jubilación anticipada, entre otras), tal y como solicita CSIF. Asimismo, los profesores de la concertada, a través de la asociación Adecex, insisten en la necesidad de homologar su condiciones a los de la pública.

Pero otras son más propias de la época. STE-Ex, PIDE, CCOO y el propio CSIF se han quejado abiertamente de los "errores", de la "falta de coordinación" y de la "ineficacia" de la Consejería de Educación a la hora de cubrir las plazas vacantes y las sustituciones, y afirma -aunque sin datos- que muchos alumnos han iniciado el curso sin contar con todos sus profesores. CSIF considera "ridículo negociar todos los años dentro del calendario escolar un día arriba, un día abajo de clases y después comenzar el curso con plazas sin cubrir".

CC.OO. va más allá y considera "inadmisibles" los recortes en el profesorado. En concreto, habla de "eliminación de profesores para grupos de diversificación, los desdobles, así como la insuficiente dotación de personal para atender a los refuerzos y apoyos que necesitan los alumnos con necesidades específicas.

Finalmente, ANPE ha introducido un nuevo debate con la propuesta de incluir en la futura Ley de Educación extremeña la condición de "autoridad pública" para los docentes, con el fin de "contribuir a la normalización del clima de convivencia y estudio que debe imperar en un centro educativo y que actualmente no existe".

Sobre este asunto, y con los actos de violencia ocurridos en las últimas semanas en Pozuelo de Alarcón y Olivenza como telón de fondo, el PP extremeño ha criticado el "déficit educativo" que padece el alumnado, así como "el abandono de valores como la cultura del esfuerzo, el respeto y la defensa de la autoridad del profesorado.