«Es una realidad que da satisfacción, en determinadas situaciones, a personas que no pueden tener una familia y quieren formarla», así argumentó ayer José Antonio Monago, presidente del PP extremeño, su apoyo a la gestación subrogada. De hecho, él será quien defienda esta opción en la Ponencia Social del próximo congreso nacional que los populares celebran este fin de semana. Monago tiene clara su postura: «Yo sí estoy a favor».

«En un partido siempre hay muchas sensibilidades y mucha gente que tiene distintos pareceres, porque no es una secta donde todos deben obedecer al líder y todos tienen que pensar igual, y más en estos temas que son novedosos en la sociedad. Cada cual tiene su opinión y todas son respetables», subrayó. Y añadió: «Los compromisarios del PP de Extremadura, en el congreso nacional, tendrán que manifestarse sobre este tema con libertad de conciencia».

En cuanto a las críticas que suscita esta opción, respondió: «Es cierto que hay un elemento que se pone siempre en contra de la gestación subrogada que es el tema mercantil, pero es que hay una gestación subrogada que no tiene ese ánimo mercantil».

NUEVA LEGISLACIÓN / El presidente del PP extremeño destacó, en este sentido, que este tema «se va a tener que legislar en el Parlamento español porque lo demanda la inmensa mayoría de la sociedad».

«Esto no es una moda, ni estar a la última, es una nueva realidad que a los partidos les ha cogido un poco por sorpresa pero a la que ahora hay que darle una respuesta», insistió.

Lo cierto es que el debate sobre la gestación subrogada está de plena actualidad en el ámbito nacional. Además de ser un tema a analizar en la próxima cita de los populares (donde hay posturas a favor y en contra), Ciudadanos, con Albert Rivera al frente, ya ha expresado su posición clara al respecto celebrando un acto que tituló: ‘Gestación subrogada. Una apuesta de futuro’.

GARANTIZAR LOS DERECHOS / Una actitud a favor también muestran en PSOE y Podemos, aunque este último partido matiza que «siempre y cuando se garanticen los derechos de las gestantes y con la seguridad de que no se convierta en un negocio de mercantilización de los cuerpos de las mujeres».

Desde una postura totalmente opuesta se expresan círculos feministas como la plataforma ‘No somos vasijas’: «Nos mostramos en contra de la utilización de eufemismos para dulcificar la idea de un negocio de compraventa de bebés».