Se buscan felinos de mediano tamaño, de entre 8 y 14 kilos de peso, que pueden vivir hasta 12 años... El último censo existente y no del todo fiable apunta a la existencia de entre 70 y 100 linces ibéricos en Extremadura, uno de los pocos territorios del país donde este animal no se ha extinguido. Para que este censo no siga menguando, la Dirección General de Medio Ambiente ha puesto en marcha el Plan de Recuperación del Lince Ibérico para poner entre algodones a esta especie en peligro de desaparición.

El programa de actuaciones fue presentado ayer en Mérida por el responsable del departamento, Leopoldo Torrado, y un técnico del gobierno regional experto en recuperación de la especie. Torrado subrayó ayer que Extremadura se convierte así en la primera comunidad en contar con un plan de salvación de este felino, víctima de la caza ilegal, lazos, cepos y del descenso vertiginoso de la población de su bocado más preciado: el conejo de monte.

Javier Caldera explicó a Efe que "en el mejor de los casos" se cree que existen unos 200 ó 300 linces, la mayoría en Andalucía. Los inventarios hasta ahora existentes se basaban en comunicaciones de avistamiento de ejemplares por parte de cazadores y campesinos de estas comunidades.

Ahora se quiere tener más precisión y sólo se incluirán en el censo los linces de cuya existencia se tenga constancia por muestras de ADN en excrementos o que hayan sido fotografiados con cámaras especiales. En la actualidad existen 40 repartidas por la región y se instalarán otras 50 unidades para intentar captar imágenes del lince donde se cree que vive: Granadilla, Sierra de Gata, Sierra de San Pedro y las Villuercas. El objetivo se dispara cuando el animal pisa la cámara.

SITUACION CRITICA

El plan parece ser muy necesario a la vista de lo que dice Ecologistas en Acción. Este colectivo conservacionista advierte de que la situación del lince en Extremadura es crítica, donde sólo exisitirían individuos vagabundos en determinadas áreas.

La Fundación Global Nature, con sede en Torrejón el Rubio, también ha puesto su granito de arena al desarrollar un proyecto en colaboración con el Parque de Monfragüe para censar los conejos existentes en la zona y mejorar su hábitat.

Esta asociación entiende que el conejo es "eslabón básico en la cadena alimenticia del ecosistema del bosque y matorral mediterráneo, del que dependen muchas especies en peligro de extinción o vulnerables, como el lince ibérico, el águila imperial ibérica o el águila perdicera".

Leopoldo Torrado manifestó ayer que el centro de recuperación de especies protegidas que Medio Ambiente tiene en Sierra de Fuentes ha dispuesto instalaciones para acoger linces ibéricos procedentes de Andalucía y el personal está adiestrado en el manejo de linces europeos, de los que ya alberga dos ejemplares y espera otro.