PSOE y PP han realizado un balance muy distinto del año del Gobierno de Zapatero. Mientras que los socialistas inciden en los beneficios que le ha reportado a la región el nuevo Ejecutivo central, los populares aseguran que se ha producido un retraso en las infraestructuras y un incremento del paro.

Para el presidente del Partido Popular regional, Carlos Floriano, la confluencia de los dos gobiernos socialistas en Extremadura ha significado que las comunidades más pobres en general, y la extremeña en particular, "tienen más situaciones de desconfianza y de peligro que cuando gobernaba el Partido Popular en Madrid".

Si se ha notado la confluencia de los dos gobiernos socialistas en la región, señaló el dirigente popular, "es porque el paro ha aumentado y se han retardado infraestructuras".

En el caso del empleo, afirmó que ha aumentado en 8.000 personas el número de desempleados pese al Plan Especial de Empleo otorgado a la región, y con respecto a infraestructuras reprochó obras como la del AVE, "que sigue fuera del BOE", o de la conversión de la N-630 en autovía, cuyas obras afirmó que se han retrasado hasta el 2008 a la vista de las últimas adjudicaciones de tramos realizadas.

Por su parte, el portavoz del PSOE en Extremadura, Francisco Fuentes, resaltó los beneficios que el Gobierno socialista ha traído a la región, entre los que destacó la subida de las pensiones para más de la mitad de los pensionistas extremeños y el incremento del salario mínimo interprofesional.

Fuentes consideró favorable el aumento del salario mínimo interprofesional, que afecta a un "número importante" de los trabajadores de la región, ya que por "primera vez" se han beneficiado de esta propuesta y su sueldo se ha elevado hasta los 600 euros. "Estas son medidas que favorecen a todas las autonomías, pero sobre todo a Extremadura", apuntó el portavoz del PSOE.