Los efectos de la crisis económica no sólo se han manifestado en grandes empresas y comercios. Las familias extremeñas han tenido que apretarse el cinturón en muchos aspectos, y entre los más necesitados el incremento de la pobreza ha sido notable. Necesidades básicas como la alimentación o la educación se han visto afectadas por la falta de liquidez económica, y precisamente en este último campo, el educativo, la organización Cruz Roja interviene para promover el éxito escolar entre los más pequeños.

Entre las principales dificultades se encuentra, por ejemplo, la imposibilidad de muchos de no poder hacer frente a los requerimientos que los centros escolares hacen en algunas ocasiones. Muchas familias encuentran dificultades a la hora de incorporar en casa las indicaciones que se les plantean en las tutorías, ya que se sienten incapaces de ayudar en las tareas escolares de sus hijos, o no pueden sufragar la compra de libros, material escolar, vestuario adecuado para asistir a las actividades de la escuela y las actividades extraescolares.

En este campo es en el que actúa Cruz Roja, que con su proyecto de Promoción del Exito Escolar atendió en Extremadura en el año 2014 a más de 2.300 niños, niñas y jóvenes pertenecientes a 900 familias en situación de riesgo o dificultad social. A nivel nacional, son más de 500 las poblaciones en la que se trabaja y más de 79.000 menores participantes.

El programa de Promoción del Exito Escolar se estructura en dos fases. La primera de ellas está centrada en la formación continua, y se desarrolla en 11 localidades de la región: Badajoz, Montijo, Olivenza, Fuente de Cantos, Villafranca de los Barros, Villanueva de la Serena, Zafra, Cáceres, Plasencia, Navalmoral de la Mata y Jaraíz de la Vera. Entre las actividades del proyecto se encuentran el apoyo educativo, donde se trabajan técnicas de estudio o el seguimiento académico y la realización de tareas escolares y refuerzo de materias específicas. Este apoyo se ofrece tres días a la semana, con una duración de dos horas y media por sesión. En cada espacio hay aproximadamente 20 niños cuyas edades oscilan entre los 6 y14 años, aunque la mayor parte de los asistentes tienen entre 8 y 12. Para su control y cuidado trabajan de forma voluntaria unas 15 personas, distribuyéndose dos o tres por clase.

Así lo ha explicado a este medio el Coordinador Técnico de Cruz Roja Juventud Regional, Víctor Domínguez, que recuerda que este programa se implantó en el año 2008, con el inicio de la crisis económica, pero fue en el 2010 cuando empezó a coger fuerza. Antes había un proyecto parecido, el Centro de Mediación Social, que se desarrollaba en Badajoz desde el año 97, pero estaba más orientado al ocio y la integración.

La selección de los niños y niñas que participan en este proyecto se realiza en coordinación con los Servicios Sociales de Base de cada ayuntamiento, que ofrece a la entidad una lista con el nombre de las personas susceptibles de participar. Actualmente, según indica Domínguez, no hay ningún niño en lista de espera para poder formar parte de este programa, que además de clases teóricas, ofrece sesiones de ocio. De ahí el éxito del mismo. "Los primeros días siempre la reacción del niño es la misma, un poco de rechazo, pero cuando entran en la dinámica del grupo, ven que es algo diferente y que se hacen cosas divertidas, la acogida es buena. De hecho, cuando acaba el curso escolar, muchos de ellos lloran".

Ayudas al rendimiento

La segunda parte del programa se desarrolla en 30 de las 32 asambleas locales de Cruz Roja. Esta fase está orientada a la cobertura de necesidades, y comienza con el inicio del curso escolar, momento en el que las familias pueden solicitar ayudas económicas relacionadas con la escolarización y el rendimiento académico de los niños, como becas de comedor, transporte o actividades.

El proyecto de Promoción del Exito Escolar se desarrolla íntegramente con voluntarios de diferente edad y perfil profesional, desde maestros y educadores a monitores o personas sin titulación que realizan labores de apoyo.