Un informe realizado por el Defensor del Pueblo sobre el sistema educativo concluye que el 36,5% de los alumnos de entre 10 y 16 años son contrarios a la inmigración. A un 27% de ellos no les parece bien que vengan inmigrantes porque pueden quitar puestos de trabajo y un 19% mantienen una oposición radical y creen que "lo mejor sería que se eduquen y que se queden en su país.

Entre los alumnos que tienen esta actitud predominan los varones. Los andaluces son los que se manifiestan más favorables y sensibles con el fenómeno. No hay datos sobre Extremadura, comunidad donde hay escolarizados 2.144 inmigrantes, alcanzando un porcentaje sobre el total de niños extranjeros que no lo supera ninguna autonomía española.

La mayor parte del alumnado autóctono, el 63,5% están a favor de que los inmigrantes estudien y trabajen en España y resaltan que contribuyen a crear riqueza.

El estudio, presentado en el Congreso, ha sido realizado de oficio en 181 centros de enseñanza en colaboración con Unicef y la cooperación del Instituto de Evaluación y Asesoramiento Educativo (IDEA).