El sindicato UGT de Extremadura defendió ayer que hay suficiente mano de obra para la próxima campaña de vendimia en Tierra de Barros y se refirió a la importancia de la mano de obra de inmigrantes y a "la pendiente incorporación de la mujer" a esta tarea.
A través de una nota, el sindicato respondió ayer a las afirmaciones realizadas hace unos días por la Asociación de Productores Agrarios de la región (OPA), que advertían de la posible falta de mano de obra en la campaña vitivinícola de este año ante la posibilidad de que se retrase y se acabe solapando con la de aceituna para aderezo.
UGT descarta que se pueda llegar a llegue a esa situación ya que, según explican en la nota, además de los 4.558 trabajadores autóctonos que hay en la comarca, según consta en el Sexpe, en los últimos años se ha producido un incremento "considerable" de la población extranjera empadronada en la comarca.
Sobre esta cuestión, el sindicato destaca que la cifra de extranjeros residentes en los siete municipios que integran esta comarca se ha triplicado en los tres últimos años. Según los datos de UGT, en el 2004 vivían en Tierra de Barros un total de 1.351 extranjeros, mientras que en el 2006 el total de extranjeros empadronados ascendía a 3.054, de los que más de la mitad (1.577) eran de nacionalidad rumana.
En el sindicato destacan, en todo caso que a pesar de que los inmigrantes tienen la posibilidad de ser regularizados como trabajadores si presentan una oferta de empleo de al menos seis meses, su incorporación "no ha sido significativo cuantitativamente", aunque puntualiza que puede ser "una solución para la falta de mano de obra del sector agrario".
En cuanto al volumen previsto para este año, las estimaciones de las organizaciones agrarias estiman que la producción será "ligeramente inferior" a la obtenida en el 2006, aunque se espera un producto de "excelente calidad". Mientras entonces se recogieron más de tres millones de hectolitros, la producción de este año podría estar en torno a los 2,5 y 3 millones de hectolitros.
