Uno de cada cuatro extremeños habrá sobrepasado los 65 años en el 2030, según las proyecciones de población publicadas esta semana por la oficina estadística de la Comisión Europea (Eurostat). Con este mismo horizonte, el ratio de dependencia --la cifra de personas de 65 o más años en relación a las que tienen entre 15 y 64-- será del 44%. Esto significa que dentro de poco más de dos décadas, por cada diez extremeños en edad de trabajar, habrá ocho jubilados.

Eurostat ha examinado la evolución poblacional para un total de 197 regiones europeas, incluidas las 17 españolas. Como el mismo autor del estudio aclara, estos resultados son proyecciones, no previsiones, ya que lo que se ha hecho es extrapolar hasta el 2015 y el 2030 los mismos datos demográficos registrados en el 2004.

De esta forma, si las tasas de mortalidad y natalidad y el saldo migratorio se mantienen constantes, Extremadura habrá perdido 31.000 habitantes en el 2030 (casi el 3% del censo actual), pasando de los 1.066.000 registrados en el 2004 a 1.035.000. De ellos, 279.000 (un 26,9%) habrán superado los 65 años.

Extremadura es una de las seis regiones españolas para las que las proyecciones de Eurostat arrojan un crecimiento vegetativo negativo, junto a Galicia, Principado de Asturias, País Vasco, Aragón y Castilla y León.

En el caso extremeño, la pérdida de población viene motivada por dos factores. En primer lugar, por un mayor índice de muertes que de nacimientos. En el 2004, año de referencia empleado por Eurostat, la tasa de nacimientos registrados en la región, 82 por cada 10.000 habitantes, se vio de sobra compensada por la de defunciones, que fueron 108 por cada diez mil personas. El segundo factor a tener en cuenta es el balance migratorio, que apenas aporta crecimiento. Extremadura es la tercera comunidad autónoma que menos inmigración internacional recibe, superando únicamente a Asturias y al País Vasco. Además, también se van más ciudadanos españoles y comunitarios de los que llegan.

Las comunidades autónomas españolas que registrarán en el 2030 las tasas más altas de personas mayores de 65 años en relación a la población en edad de trabajar serán Asturias, con un 55,8%, Castilla y León, con un 55,4%, y Galicia, con un 51%. Por contra, Murcia será la región que tendrá el porcentaje más bajo de todo el país, con un 30,8%, seguida de Canarias (32,7%) y Andalucía (34,2%). En cuanto a la media española, ésta se situará en el 38,9%.