Amnistía internacional (AI) denuncia en un informe que se hará público hoy las torturas que sufren los presos en Irak y advierte del peligro que corren miles de ellos de ser maltratados después de que el Ejército de Estados Unidos haya transferido la custodia de los detenidos a las autoridades iraquís.

En el documento, de 56 páginas y titulado Nuevo orden, los mismos abusos: detenciones ilegales y torturas en Irak, AI critica que EEUU pactara en julio, en el marco del traspaso de poderes en materia de seguridad, la entrega de todos sus presos, excepto 200, sin exigir previamente al Gobierno de Bagdad garantías de que serán bien tratados.

"Las fuerzas de seguridad iraquís son responsables de violaciones sistemáticas de los derechos de los detenidos, y se les permite hacerlo con total impunidad", reza el informe firmado por Malcom Start, director para Oriente Próximo y Norte de Africa de Amnistía Internacional.

La oenegé, que recuerda también los antecedentes de EEUU con respecto al maltrato a presos en Irak, afirma que en las cárceles del país árabe hay 30.000 presos que permanecen detenidos sin cargos y sin ser juzgados. Y detalla casos de personas que fueron arrestadas de forma arbitraria. Asegura, además, que varios han fallecido después de ser torturados dentro de las cárceles.

Según AI, la asfixia, la perforación con taladros, la suspensión prolongada de las extremidades, los choques eléctricos en partes sensibles del cuerpo, las palizas con cables o mangueras y las violaciones son parte de las torturas en las cárceles de Irak.