Tres personas murieron y otras 12 resultaron heridas en un atentado cometido la madrugada del lunes en una cafetería del centro de Pristina, la capital de Kosovo. El atentado dispara la tensión justo antes del decisivo encuentro en Nueva York que el viernes celebrarán los responsables serbios y albaneses sobre el estatus futuro de esa provincia.

El portavoz de la policía kosovar, Veton Elshani, declaró que la explosión se produjo a las 02.10 hora local (00.10 GMT) en la avenida Bill Clinton, una céntrica calle comercial donde seguían abiertos cafés y restaurantes, muy concurridos a esa hora. "La explosión resonó como un trueno. Creí que toda Pristina iba a hundirse", explicó un testigo.

La policía acordonó el lugar de la explosión, que causó la rotura de los cristales de inmuebles cercanos y cuantiosos daños materiales. También llegaron al lugar miembros de la KFOR, la fuerza de la OTAN, entre ellos artificieros irlandeses, para ayudar en la investigación. Fuentes del Hospital de Pristina informaron de que cuatro de los heridos sufrieron heridas graves y que uno se encuentra en estado crítico.

AJUSTE DE CUENTAS "Aunque no descartamos ninguna hipótesis, todo parece indicar que tiene relación con el crimen organizado", señaló el portavoz policial. Por su parte, un experto para asuntos de seguridad en Kosovo y diputado en el Parlamento kosovar, Naim Maloku, declaró a la agencia EFE que las primeras informaciones apuntan a un ajuste de cuentas entre dos organizaciones criminales.

Los responsables del Gobierno de Kosovo y los de la ONU cruzaban ayer los dedos para que se confirmara que el atentado era una acción mafiosa y que no estaba relacionado con la situación política. "No hay la menor indicación de que la explosión esté vinculada al proceso actual en Kosovo", dijo Avni Arifi, portavoz del Gobierno, refiriéndose a las negociaciones. "Todos nosotros esperamos que no se trate de un ataque terrorista", declaró el secretario general del Consejo de Europa, Terry Davis.

El atentado se produce cinco días antes de la reunión que el viernes celebrarán serbios y albaneses para tratar de llegar a un acuerdo sobre el estatus de la provincia serbia de Kosovo, bajo tutela de la ONU desde 1999.