Con seis días de retraso, el primer ministro italiano y presidente semestral de la Unión Europea (UE), Silvio Berlusconi, expresó ayer "su pesar" por "determinadas expresiones y comparaciones que hirieron los sentimientos de los miembros del Parlamento Europeo". Las disculpas se produjeron durante una conversación telefónica con el presidente de la Eurocámara, Pat Cox, según anunciaron fuentes oficiales de la institución.

Berlusconi provocó una crisis institucional en la UE el pasado 2 de julio, cuando en el hemiciclo de Estrasburgo comparó a un eurodiputado socialdemócrata alemán con un guardián de un campo de concentración nazi, y calificó al conjunto de parlamentarios de "turistas de la democracia".

Tras su disculpa, Berlusconi expresó su esperanza de "mirar hacia adelante y trabajar conjuntamente con la Eurocámara" este semestre.