El torrente de noticias pesimistas sobre la guerra de Irak, donde este mes han muerto 103 soldados de EEUU, ha colmado la paciencia del secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld. El Pentágono ha decidido poner en marcha una unidad de "respuesta rápida" para combatir la "inexactitud" de las informaciones difundidas en prensa, radio, televisión e internet sobre el conflicto, que han hundido el apoyo de los estadounidenses a la guerra y amenazan con pulverizar el férreo control que han ejercido los republicanos sobre el Gobierno de EEUU en los últimos 12 años. El martes se celebran unas elecciones legislativas que el partido en el poder, según los sondeos, perderá.

El Pentágono no considera esta iniciativa como propaganda. Se trata de "informar al público de las cosas como son", según recalcó el portavoz del Departamento de Defensa, Eric Ruff. El responsable precisó que con este objetivo se pondrá también a disposición de los medios informativos a un amplio abanico de personalidades políticas, funcionarios y analistas que se ocuparán de contrarrestar el efecto dañino de las noticias "inexactas". Para ello explicarán a los ciudadanos, "de forma precisa", la información oficial.

ANTECEDENTES MALOGRADOS No es la primera vez que el Pentágono lanza una contraofensiva propagandística, aunque el éxito de anteriores iniciativas ha sido escaso. Justo después del 11-S, en octubre del 2001, el Departamento de Defensa creó la llamada Oficina de Influencia Estratégica (OIS), cuyo objetivo era "desarrollar noticias, posiblemente falsas, para divulgarlas en la prensa extranjera", poder influir en la opinión pública de otros países y, por extensión, en la de sus líderes. Pero la existencia de la OIS, de la cual dio cuenta The New York Times en el 2002, fue corta, pues el Pentágono se vio forzado a cerrarla.

De todas maneras, contrarrestar la mala prensa que ha generado la guerra de Irak siguió quitando el sueño a Rumsfeld, como él mismo confesó el pasado mes de agosto en un discurso. "Nuestros enemigos se han adaptado con gran eficacia a la forma de combatir en la actual era de la información, mientras que nuestro país y nuestro Gobierno no se han adaptado", había dicho Rumsfeld en febrero.

OBSESION POR LA RED Internet --incluyendo los blogs -- es lo que más tiene preocupado al jefe del Pentágono, ante la inmensa cantidad de información que se difunde cada día por este medio. Precisamente por eso, la nueva unidad de "respuesta rápida" contrainformativa lanzada por Rumsfeld utilizará la misma herramienta y empleará a fondo los recursos de internet para responder a toda velocidad, las 24 horas al día, a las noticias que le interese contrarrestar.

Por el momento aún no se ha hecho público el presupuesto que destinará el Pentágono a esta nueva ofensiva propagandística, pero se sabe que el proyecto no saldrá barato. Según el diario USAToday , el Departamento de Defensa invirtió el año pasado 300 millones de dólares en colocar informaciones proestadounidenses en medios extranjeros.