No deben estar muy contentos en las organizaciones de musulmanes en EEUU cuando escuchan las opiniones que lanzan los sectores más radicales del islamismo tras la matanza de Fort Hood, como las del imán Anwar al Awlaki refiriéndose al autor de la matanza, Malik Hasán, como un "héroe". Y es que después del trabajo de los últimos años y los avances logrados para recomponer la imagen del mundo musulmán tras el 11-S, parece que vuelve a extenderse el miedo en las comunidades islámicas ante la posibilidad de que se repitan actos de violencia indiscriminada en su contra.

"Aunque era musulmán, lo que hizo va en contra de las leyes del islam", afirma Abdul Rauf, un conocido imán de Nueva York. "Llamarle héroe es una burla al principio islámico de justicia", apunta Nihad Awad, director ejecutivo del Consejo de Relaciones Americano-Islámicas. Ambos coinciden en que no se puede generalizar ni sacar conclusiones anticipadas de lo ocurrido en Tejas.

Sheij Shaker Elsayed, el imán de la mezquita de Dar al Hijrah de Falls Church, mostró su sorpresa. "No puedo creer que esa persona callada y pacífica que entraba y salía de nuestra mezquita haya podido hacer esto", indicó. "Lo primero que pensé cuando me enteré es: ´ojalá se hubiera llamado Joe Smith´", reconoce Fouad Zeaiter.