El Gobierno de Kenia rechazó ayer la celebración de nuevas elecciones antes de tres meses, como exige el opositor Movimiento Democrático Naranja (MDN). La única forma de celebrarlas sería, según el portavoz gubernamental Alfred Mutua, una orden del Tribunal Constitucional.

Como única excusa para negarse a celebrar otra consulta electoral, Mutua responsabilizó a la oposición, que convocó los disturbios tras las protestas por el fraude en las urnas, que hasta ayer causaron al menos 356 muertos.

Por segundo día, las fuerzas del orden ocuparon Nairobi para impedir que los partidarios del MDN se manifestaran contra la proclamación del presidente saliente, Mwai Kibaki, como ganador.