Reforzado por su victoria en las primarias del Likud, el primer ministro Ariel Sharon anunció la madrugada del viernes que Israel perseguirá a los responsables de la muerte de tres de sus ciudadanos en el atentado del jueves en el hotel Paradise de Mombasa. "Somos una nación fuerte que no cederá al terrorismo. Israel perseguirá a aquellos que han vertido la sangre de sus ciudadanos", afirmó. "Nuestro largo brazo alcanzará a los atacantes y a aquellos que organizaron el atentado", añadió. Por otra parte, Israel ordenó ayer el cierre de su embajada en Manila. Sus delegaciones oficiales en todo el mundo están en alerta.
