La Unión Europea (UE) desplegará un equipo de observadores en Ucrania para verificar el tránsito sin obstáculos del gas ruso hacia Europa a través del gaseoducto ucraniano, según anunciaron ayer el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el primer ministro checo y presidente semestral de la UE, Mirek Topolanek.

La UE propuso esa fórmula después de que durante la madrugada de ayer se interrumpiera totalmente el suministro de gas ruso a los países europeos a través del gaseoducto ucraniano. Moscú responsabilizó de nuevo a Kiev de la interrupción del suministro a la UE al apropiarse del gas destinado a los países europeos, mientras que el Gobierno ucraniano culpó al monopolio estatal ruso Gazprom de no suministrar suficiente gas.

"Rusia y Ucrania han aceptado el despliegue de esos observadores europeos", afirmó Barroso, después de mantener sendas conversaciones telefónicas con el primer ministro ruso, Vladimir Putin, y con la primera ministra ucraniana, Yulia Timoshenko.

Los detalles técnicos de esa misión de supervisión y control de los ocho puntos de entrada de gas ruso en Ucrania se fijarán hoy durante una reunión que mantendrán en Bruselas la Comisión Europea y la presidencia checa con los representantes de los ejecutivos de Moscú y Kiev y con los directivos de las compañías estatales Gazprom (Rusia) y Naftogaz (Ucrania).

Tras acusar de nuevo a Ucrania de sustraer el gas ruso destinado a la UE, Gazprom anunció por la tarde la interrupción total del envío de gas a través del sistema ucraniano de gasoductos. Putin indicó que ese suministro no se reanudará hasta que estén desplegados los observadores europeos para impedir que Kiev siga apropiándose del gas ruso destinado a la UE.

La presidencia checa de la UE y la Comisión Europea calificaron la interrupción del suministro sufrida desde hace dos días por los países europeos de "totalmente inaceptable" y exigieron la reanudación inmediata del suministro de gas.

LA ADVERTENCIA Topolanek advirtió de que, si hoy no quedaba restablecido el suministro de gas ruso a los países europeos, "la presidencia de la UE adoptará medidas más duras", aunque luego eludió precisar cuales podrían ser esas medidas.

Barroso insistió en que tanto Rusia como Ucrania se están jugando su "credibilidad y fiabilidad" como suministrador de gas y como transportista de gas, respectivamente. "Rusia debe enviar el gas y Ucrania no debe interrumpir su transporte hacia la UE", indicó Barroso. "Si Ucrania quiere establecer unos lazos más estrechos con la UE no debería crear ningún problema en el suministro de gas a los países europeos", advirtió Barroso.

Sin embargo, tanto la presidencia checa de la UE como la Comisión Europea eludieron una vez más responsabilizar a uno de los dos países de la nueva crisis gasista, muy similar a la que se produjo hace tres años. "No es relevante si Rusia o Ucrania es el responsable. Lo importante para el consumidor europeo es que no hay suministro. Ambos tienen que resolver con urgencia su conflicto comercial bilateral", señaló José Manuel Durao Barroso. Putin, por su parte, destacó que la crisis demuestra la importancia del nuevo gaseoducto bajo el mar Báltico que impulsan Rusia y Alemania para transportar directamente al corazón de Europa el gas ruso.