La designación de Teófilo González Porras , con uno de los currículum vitae más relevantes de la sensibilidad cultural cacereña y regional, al frente de la Oficina Cáceres 2016 , supone un excepcional acierto para revitalizar la imagen y la proyección de la ciudad de cara a alcanzar la Capitalidad Cultural de Europa en dicho año.

Integrado en el cacereñismo y el extremeñismo más profundo así como en las raíces de su sociedad, poseedor de los más cualificados eslabones a lo largo de su trayectoria, basados en la honradez, la constancia, el esfuerzo y el compromiso con todas las responsabilidades que le han distinguido, el profesor González Porras comienza a pilotar el timón de uno de los proyectos más ambiciosos en el ámbito de la imagen cacerense y de nuestra comunidad autónoma a lo largo de los últimos años.

Por delante se vislumbra, en la dureza del día a día, la perspectiva de una tarea ardua y compleja. Pero, al mismo tiempo, también se divisa uno de los retos más ilusionantes de la ciudad y de la región. Una labor en la que, con su dirección, ya contamos, de partida, con la constancia de que se va a dejar, cuando menos, el pellejo entre las dificultades del camino. Algo de lo que estamos seguros por su rigor, por su empeño, por su dedicación, por su capacidad de asumir, con una exquisita disciplina, la exigencia de su trabajo, por su talante y por su capacidad de relaciones en todos los ámbitos.

XLA RATIFICACIONx unánime de su nombramiento, por las nueve entidades que componen el Consorcio Cáceres 2016 , reflejan la cualificación de González Porras. Y que ya, en sus primeros pasos, ha señalado que el proyecto debe de partir de la cooperación conjunta de todos los extremeños.

La importancia y trascendencia de la designación de una ciudad como Capital Cultural de Europa, en la que influyen los más diversos factores, desde los políticos hasta los económicos, desde los creativos hasta los comunicacionales, se conforma como una carrera de obstáculos. Como consecuencia, se hace precisa la fructificación, paulatina, de una fábrica de ideas que se vayan consolidando en el esforzado sacrificio de los despachos.

Es tanto lo que hay detrás de una nominación de estas características, la Capitalidad Cultural de Europa, y son tantos los intereses de todo tipo, como los que se pueden derivar de la lucha de otras ciudades aspirantes y por tanto rivales en el envite, que, a partir de ahora, iremos asistiendo, paulatinamente, a un renacimiento y a una revitalización de la imagen de Cáceres y de Extremadura, a través de todos los sectores, en el mágico escaparate de Europa.

La Capitalidad Cultural 2016 de Europa dispone de un camino de largo recorrido y en el que se necesita el compromiso de todos y la colaboración y el apoyo más decidido por parte de todas las instituciones. Porque de esa misma denominación pueden obtenerse los más relevantes beneficios para Cáceres y Extremadura.

Y a buen seguro que, en muy poco tiempo, al Festival Womad, al Festival de Teatro Clásico o al Festival de Música Antigua, se irán uniendo otros esfuerzos de un cacereñismo extremeñista que haga ondear la imagen de la ciudad en los más diversos confines europeos.

Con el profesor González Porras al frente del Proyecto Cáceres 2016 , nuestra apuesta de una total confianza en su gestión a través de una empresa que requiere la mayor relevancia publicitaria en el ámbito de las dinámicas europeas.

Ahora lo que se precisa es el redoblar constante de los más significativos esfuerzos para que la marca de calidad cultural Cáceres-Extremadura vaya ganando enteros en una puja que necesita de esa cooperación por parte de todos los extremeños y organismos que exponía González Porras con motivo de su nombramiento.

Hoy Cáceres, Capital Cultural de Europa 2016, está un poco más cerca.

*Periodista